Nos encantan los dulces, pero si además tienen origen de nuestras tierras, aún más. No hay nada mejor que seguir con las tradiciones y la gastronomía de nuestras familias, y más, si son recetas deliciosas que han pasado de generación en generación desde el siglo XVII. ¿Sabes de qué postre estamos hablando?
Sí, sí… ¡el pastel vasco o gateu basque! Originalmente era un pastel seco, es decir, sin relleno, que únicamente se fabricaba con harina de maíz, grasa animal (de cerdo generalmente) y miel. Se dice que se comenzó a realizar en las casas de Cambó (Lapurdi), y que recibía el nombre de “etxeko biskottxa” o simplemente “bizkotxat”.
En el siglo XVIII comenzó a rellenarse con frutas de temporada como moras, higos o cerezas, que tenían los caseros a su alcance. En esta época también lo empezaron a denominar “pastel de los vascos” que terminó por evolucionar hasta “pastel vasco” o “gateu basque”, como lo conocemos en la actualidad.
Un siglo más tarde, entre finales del siglo XIX y en el siglo XX, los artesanos pasteleros comenzaron a incorporar como relleno crema pastelera, y en ocasiones, también incluso vainilla y ron, con el objetivo de conseguir un mejor sabor.
En la actualidad, según la zona, podemos encontrar variantes del pastel original vasco. En la zona de Iparralde, por su cercanía a Itxassu, una zona con gran cantidad de cerezos, suelen estar siempre rellenos de cereza negra. Sin embargo, en otras áreas, sigue predominando los rellenos de crema o los fabricados con almendra molida.
¿Quieres aprender a hacerlo para sorprender a todos tus amigos y familia durante las fiestas navideñas? Te proponemos dos recetas diferentes, ¡la receta original y la del toque a limón!
Comenzamos preparando la crema. Para ello, hervimos la leche entera Kaiku KMO con canela y mientras, mezclamos aparte las yemas de huevo con el azúcar y la harina fina de maíz.
Cuando la leche esté caliente, vertemos una parte sobre las yemas, mezclamos y volvemos a incorporar el conjunto al cazo anterior. Calentamos hasta que espese, y cuando esté listo, retiramos la rama de canela y reservamos.
Para la masa mezclamos la mantequilla con el azúcar hasta que consigamos una mezcla homogénea. Añadimos las yemas y los huevos mientras removemos y finalmente agregamos la harina, la levadura y la sal tamizadas.
Colocamos en un molde con harina una parte de la masa y el relleno de la crema pastelera. Tapamos con otra porción de masa y horneamos a 180ºC durante 30 minutos. ¡Dejamos enfriar y lista para disfrutar! ¿Tiene buena pinta, verdad?
Para hacer la crema de limón, comenzamos calentando la leche entera Kaiku KM0 en un cazo. En un bol aparte, batimos las yemas de huevo, el azúcar y la harina fina de maíz. Le añadimos la ralladura de dos limones y los yogures Bifi de limón. Cuando la leche esté caliente, vertemos el conjunto y calentamos hasta espesar. Reservamos en frío.
Para la masa, mezclamos la harina de trigo y la levadura tamizadas con el azúcar. Añadimos la mantequilla a punto pomada, la yema y los huevos, y removemos hasta conseguir una mezcla homogénea
Al igual que en la otra receta, enharinamos un molde y lo cubrimos con una parte de la masa. Colocamos la crema de limón y cubrimos con la otra porción de masa. ¡Y al horno durante 30 minutos a unos 190ºC!
¿Con cuál te quedas, con la versión original o con la de crema de limón? Nosotros no nos podemos decantar por ninguna. ¡Son un básico en nuestros desayunos de Navidad! Cuéntanos en los comentarios cuál es tu favorita.
