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Seguro que si eres del País Vasco has tenido la suerte de poder disfrutar del aurresku en algún evento, ya sea en primera persona o por la televisión. Pero, ¿sabes cómo surgió esta popular danza vasca y en qué consiste?

El aurresku es una danza popular que se baila a modo de homenaje o reverencia, delante de personas destacadas, ya sean en actos públicos, inauguraciones o incluso bodas. Convirtiéndolo en una de los actos culturales tradicionales más conocidos de Euskal Herria, tanto para las personas de aquí como para las de fuera. 

En la actualidad, el aurresku, tal y como lo conocemos hoy en día, es bailado por uno o dos dantzaris (bailarines) acompañados por un txistulari, quien toca el txistu con una mano y con la otra toca el tamboril. El aurreskulari va vestido de la manera tradicional, es decir, camisa, pantalón y alpargatas negras, faja verde y txapela negra. 

Los pasos de baile, aunque en su origen se improvisaban, se fueron fijando y complicando, lo hace necesaria una formación para poder interpretarlo. En la actualidad está formado por cuatro partes: Aurrez-aurre (desafío), Esku aldatzea (pasamanos), Zortziko (contrapás) y Agurra (despedida). 

Aunque actualmente es una danza individual, no era así en sus orígenes, pues comenzó como una soka dantza (baile de la cuerda). Este se bailaba en corro, generalmente compuesto sólo por hombres unidos de la mano, o sujetando pañuelos, y formando una “cuerda”.

Estaba compuesto por varios pasos de baile y tenían especial importancia, el primer dantzari, al que se le llamaba aurresku, (mano delantera) y el último dantzari, al que se denominaba atzesku (mano trasera). La tradición consistía en que ambos dantzaris debían dar una vuelta por la plaza con sus boinas en la mano. El aurresku era el protagonista, y por ello realizaba un primer baile. 

Tras este, el aurresku y atzesku se colocaban en el centro de la plaza y realizaban un baile frente a frente, el aurrez-aurre, también conocido como desafío. En la siguiente fase, dos o cuatro miembros de la hilera salían para elegir a una mujer, normalmente  que tuviera relevancia en el pueblo para convertirla en la pareja de baile del aurreskulari.  Una vez terminados sus pasos de baile,  se repetía todo el ceremonial con el atzesku, a quien se le elegía otra compañera de baile.

Con el paso de los años, las partes de la soka danza fueron desapareciendo hasta derivar en un baile individual como lo conocemos en la actualidad.  

¿Conocías la historia de este baile tan tradicional? Cuéntanoslo en los comentarios.